miércoles, 30 de enero de 2008

¿Por qué este blog?

Somos profesores de Escuelas Oficiales de Idiomas de la Comunidad de Madrid y escribimos este blog porque estamos indignados con nuestras autoridades académicas (Ministerio de Educación y Consejería de Educación). No nos escuchan, no nos entienden, somos un lujo para ellos. Cuando les preguntas por la formación en idiomas, te responden que para eso están los llamados colegios bilingües.

Primero: ¿Quiénes somos? Somos profesores de una institución que cuenta con más de treinta centros, sólo en la Comunidad de Madrid: las Escuelas Oficiales de Idiomas. Nos dedicamos a la enseñanza de idiomas a la población adulta (mayores de 14 años). Llevamos haciéndolo desde que se creó la primera Escuela en 1911 en la Cuesta de Santo Domingo en Madrid. Entonces nos llamábamos Escuela Central de Idiomas.

Nuestra oferta educativa: 22 idiomas (todos los nacionales co-oficiales, los oficiales de la UE, además de Ruso, Chino, Árabe y Japonés. Hasta ahora empezábamos desde cero hasta el nivel más alto de competencia lingüística.

Desde hace menos de un año, la autoridad educativa ha recortado drásticamente la posibilidad de llegar al nivel más alto de aprendizaje, es decir, el nivel que el Consejo de Europa define como el más adecuado para el acceso de estudiantes y profesionales a muchas becas, ofertas profesionales y educativas en cualquiera de los países de la Unión Europea.

¿Qué quiere decir esto? Pues que los que quieran obtener una certificación o diploma de los niveles más altos de aprendizaje de un idioma tendrán que acudir a instituciones privadas o extranjeras. Nosotros ya no podemos certificar los niveles superiores y, por supuesto, no podemos enseñarlos en nuestras aulas: el nuevo plan de estudios para EEOOII publicado por el MEC y desarrollado por la Comunidad de Madrid sólo llega al nivel B2 de los 6 (A1 y A2, B1 y B2, C1 y C2) reconocidos por el Consejo de Europa.

Por nuestras aulas pasan miles de alumnos cada año: estudiantes universitarios, trabajadores, profesionales, personas sin empleo, etc. También tenemos una oferta de enseñanza de idiomas a distancia, That's English!, si bien limitada a la formación elemental en lengua inglesa.

Nuestra oferta educativa acompaña y sirve al adulto durante toda su vida, como recomienda el Consejo de Europa en tiempos tan cambiantes para la vida laboral.

Lamentamos que la autoridad académica no acabe de entender la función y naturaleza de nuestras enseñanzas. Cuando piensan en nosotros piensan en el inglés, el bilingüismo, la enseñanza primaria, la secundaria, etc. No nos sitúan en lo que verdaderamente somos y en lo que aportamos.

Lo último:

1. La congelación de plazas para el acceso a la enseñanza en Escuelas Oficiales de Idiomas, que parece decidida en la Comunidad de Madrid, es incomprensible e injustificable. Precísamente este año, cuando se va a acabar de implantar un nuevo currículo (6 años académicos para la mayoría de los idiomas y 8 para árabe, chino y japonés).

2. Muchos de nuestros alumnos van a comprobar cómo en las baremaciones para becas y puestos en la función pública la certificación de nivel B2 (futuro nivel avanzado) de la EOI se verá reducida. En casos de comunidades autónomas con lengua propia ni siquiera alcanzaría el nivel exigido por sus administraciones para el acceso como empleado público a las mismas.

¿Se trata de desconocimiento, indiferencia,... o de planes privatizadores de la enseñanza superior en idiomas?


¿Acaso quieren dejar la guinda del pastel a las instituciones privadas y extranjeras que sí imparten esos niveles?

Os invitamos a compartir vuestros comentarios, vuestra experiencia con nosotros. Hay serios motivos para estar preocupados e indignados.

15 comentarios:

Elisa dijo...

Evidentemente lo que se está buscando con todas estas medidas, es conseguir que todo en este pais se privatice... ¿Para qué se va a estar manteniendo una Ecuela Pública que nos cuesta dinero, si tenemos las privadas? Deberían darse cuenta nuestros queridos políticos, que se llaman así mismos representantes del pueblo, que "su" pueblo no tiene la misma capacidad monetaria que ellos, y que igual no pueden gastarse tantísimo dinero en aprender un idioma que luego les es exigido para casi todo. Con esta medida y con todas las demás deberíamos darnos cuenta de qué esta pasando en nuestro país. Debemos unirnos y luchar por lo que es un derecho, no un privilegio. Para cualquier cosa yo, os apoyo.

fbazaga dijo...

A los que cierran los ojos al futuro:
Ya han congelado las oposiciones, además de cerrarnos el paso a la certificación de los niveles superiores en idiomas.

Lo siguiente será contar cuantos alumnos nos "quedan" Hagan los cálculos.

No importa: el British, el Goethe, el Italiano, La Alliance,... se ocuparán de eso... y si no las universidades, que ahora se van a dedicar a enseñar idiomas y dejarse de zarandajas filológicas.

El estado ya cumple con su tarea a través de los colegios llamados "bilingües". En diez años todos bilingües. ¿Las escuelas oficiales de idiomas, para qué?

Y es que en el fondo el papanatismo de la sociedad española siempre acaba alineándose con los deudos de Jimenez Losantos para acabar contratando intérpretes y traductores que chamullan esas lenguas que ni dios entiende. ¿Escuelas de Idiomas? ¿para qué?

Mario dijo...

La invasión de lo público por lo privado, la venta de las cosas públicas (¿vender lo que era de todos? ¿pero quién demonios puede hacer eso? ¿o es que no eran de todos sino del Gobierno?) para que pasen a manos privadas, que las gestionen con eficacia y rapidez (o sea, para que den dinero, que es lo único que cuenta) es algo que uno va constatando por todas partes, una condena que el corazón padece constantemente. Las EEOOII, a las que han venido a aprender lenguas miles de personas (desde estudiantes de filología que venían a aprender a hablar la lengua que estaban estudiando en la universidad, hasta profesores universitarios interesados en dominar lenguas minoritarias, pasando por diversos tipos de profesionales que precisaban dominar una lengua para desempeñar su labor, para terminar con el público en general que acudía para aprender a usar la boca de otro modo), las EEOOII, digo, han sufrido un ataque mortal. Recorte drástico de los currícula oficiales mientras otras instituciones privadas o semiprivadas ofrecen a sus clientes la posibilidad de alcanzar el limbo o, incluso, el paraíso del nivel superior, reservado en exclusiva para los justos. Proliferación geométrica de los Exámenes Oficiales elaborados con los máximos controles de calidad y con procedimientos científicos para su administración, que permiten determinar, con una precisión de relojería, lo que usted sabe hacer en chino, en francés, en irlandés, en portugués o en árabe, y que vendrá a ser lo mismo en todas esas lenguas. Tablas de la Ley para la corrección de que lo que usted suelta por esa boquita o escribe con esa pluma, elaboradas con criterios tan exactos y fïeles, que por sí solos decidirán si se queda usted en este curso o pasa al siguiente. En fin, la maquinaria educativa, qué les voy a contar a ustedes.

Bien se ve lo que les importa a las Autoridades Educativas: que los españoles del futuro sepan cerrar un negocio en un inglés chapurreado. Lo de aprender una lengua a la llana, lo de dejarse arrastrar por la música de sus frases y por sus maravillosos mecanismos, el puro placer de sentir que parece que uno se entiende con la gente de otra tribu, lo de jugar con la lengua, lo de ver que el mundo quizá no sea el mismo en otras partes, eso, ¿qué importa al lado de la Convalidación en el interior del Espacio Europeo de Niveles de Dominio sobre un Idioma? ¿Qué importa aprender frente al hecho de Certificar que uno sabe algo? Nada, como ustedes mismos ya saben. Nada para conseguir un puesto de trabajo o sumar puntos para una oposición. Nada para que te manden al espacio exterior en vuelo interestelar. Nada para que puedas colgar un título en un despacho. Sí, para todas esas cosas lo de dejarse enganchar por una lengua no importa nada de nada. Pero para otras cosas, sí. Y mucho, claro.

¿Que cuáles son? Eso usted mismo, pero algunas pistas le he dado. Bastante he hecho con mostrar a las claras lo que nos estamos jugando: que las EEOOII terminen siendo Escuelas Oficiales de Idiotas o Escuelas de Idiotas Oficiales.

ROBIN BROOKS dijo...

No nos alarmemos colegas, que los tiros no van p or ahi. Ademas porque conos generalizais. A los unicos que les va la marcha del private es a los populares. MAdrid esta a la cabeza en toda Espana.
Otra cosa, no nos quejemos que seis anos son mejor que 5. Y ademas, quien salia con un nivel de C1 antes, pues nadie. Para que enganarse. Un examen de 10 minutos oral, no es suficiente para medir. Y lo sabemos por experiencia.
Lo de las oposiciones, pues ya sabemos la politica del equipo Aguirre, dar posibilidades a los que se empollan el temario de arriba abajo, y a la experiencia se pasan por el forro. Y ante el periodo transitorio, lo mejor es no convocar.
Se creen que trabajar en este cuerpo es la Panacea, ellos deberian estar sudando sangre las 4 horas diarias para que sepan lo que vale un peine.
CRETINOS TOD@s.

Anónimo dijo...

Creo que se ha exagerado mucho sobre el nivel de las Certificaciones expedidas por las EEOOII, en mi caso tengo el Certificado de Aptitud en Francés y en Italiano y el nivel de estos certificados no llega ni de lejos al del DALF C2 o al del CELI 5 o CILS 4, lo sé muy bien porque soy titular de estas certificaciones, expedidas por organismos extranjeros de gran calidad que cuentan con profesorado NATIVO y altamente especializado y que por ende son las ÚNICAS RECONOCIDAS OFICIALMENTE por la ALTE. Creo que el nivel B2 de EEOOII es más que justo, lo que es una lástima es que a l@s ciudadan@s se nos hurte la posibilidad de acceder directamente a una enseñanza de idimas de calidad, no me parece excusa la de unas tasas académicas relativamente bajas, exijo a las AA educativas mi derecho a ser yo quien decida donde invertir mi tiempo y mi dinero ¡CHEQUE ESCOLAR YA!

Anónimo dijo...

Es verdad que la EOI nunca llegó a dar C2. Pero no es normal que se le prohiba llegar a este nivel, ahora que los niveles han sido descritos y establecidos con claridad por la UE y se puede planificar con transparencia cuáles son los objetivos.

La EOI es un sistema admirable. España, tan repetidamente presente en las colas de los estudios realizados en materia de educación y en otros ámbitos, puede estar orgullosísima de este invento democrático y justo. Necesitamos todos un servicio público de calidad al alcance de todos.

Yo soy profesor de francés en un colegio privado y caro. Pues mi sueldo es una miseria (cuando cobro: en verano, por ejemplo, no) y no puedo pagarme un curso de inglés en el british ni unas clases particulares para mis hijos. No me llega el sueldo, Espe, sabes lo que es... ¿no?

¿Qué hacen realmente? Reservar el derecho a SABER y SABER HACER (véase marco común...) a los que se lo pueden permitir porque sus padres o ellos mismos supieron explotar a los demás malnacidos. Fomentar el consumismo y los créditos para tener acceso a competencias hoy imprescindibles para quien pretende mejorar su C.V y tener un futuro más cierto.
Las derechas europeas nos llevan directamente al siglo 19. Es allí donde se encuentran más a gusto.

Los profesores de EOI preparan, en su mayoría, excelentes clases porque el sistema les permite hacerlo. Lo sé por haber ido como alumno. En las instituciones privadas, las calidad viene determinada por la precaridad del profesorado, la presión laboral y un horario sobrecargado. Son factores que impiden dedicarse de lleno a lo esencial. Lo sé por experiencia propia.

Si se confirma que la congelación viene impulsada por una motivación má amplia, por ejemplo en caso de éxito del PP en marzo y de un nuevo plan (no será el primero, ¿verdad?) para eliminar las EOI del panorama de España, habrá que investigar cuántos familiares de estos decididores tienen intereses en redes de academias y otras empresas similares.

Y habrá que movilizarse para que esto se sepa.

Un saludo a todos.

Anónimo dijo...

No es verdad que no se saliera al menos con un C1 en las EEOOII, especialmente en el caso de idiomas como español. Me consta que muchos alumnos de escuelas se presentaban a los exámenes del Instituto Cervantes cuando finalizaban cuarto curso, y la mayoría aprobaba. Ahora con ese título del Instituto Cervantes conseguirán un C2 (como lo consiguen los que se presentan en cualquier otro lugar del mundo), mientras que los alumnos de escuelas, con dos años más de clases, solo van a conseguir un B2. Es tan ridículo como indignante, pero el problema no es solo de español, ¿podéis decirme qué van a hacer en idiomas como gallego, catalán o italiano cuando tengan que dar clase durante 6 años a alumnos que en su mayoría son castellanohablantes? ¿A qué van a dedicar tantas horas si solo pueden llegar a B2? ¿Y para qué van a estudiar gallego, catalán o euskera los ciudadanos del resto de España, si solo consiguen un B2 cuando las autoridades de las comunidades bilingües están pidiendo un nivel C para trabajar allí? ¿Eso ayuda a la movilidad entre los ciudadanos?
Me gustaría que no olvidáramos que en las escuelas no solo se enseña inglés o francés. En Madrid se imparten hasta 22 idiomas y algunos de ellos no se pueden estudiar en ningún otro sitio del territorio español, de manera que no sé cómo van a poder certificar en C en finés, rumano, griego, ruso, sueco, irlandés... ¿No es eso limitar un derecho fundamental de los ciudadanos, el derecho a la enseñanza pública?

Anónimo dijo...

Y añado que se ha confirmado la congelación de las plazas de EOI para este año. Que conste que esto no es más que un principio.

Anónimo dijo...

Una pregunta sobre lo que mencionáis al inicio del tema: decís que la Comunidad de Madrid y el MEC os responde a vuestras demandas con que para eso están los los colegios bilingües. Teníamos entendido que ese proyecto era cosa de la Comunidad de Madrid, o sea de la Comunidad Autónoma de Madrid.
Gracias si podéis responder.
Saludos y suerte.

Anónimo dijo...

Yo tengo título de EOI en un idioma y certificado del país correspondiente que acredita que mi nivel en esa lengua es el C1. ¿Quién dice que el Ciclo Superior de la EOI no alcanzaba los niveles C?

Anónimo dijo...

Llevo 12 años estudiando inglés, 11 de ellos por mi cuenta, y ahora estoy haciendo 4º en la EOI. Si es cierto que no nos van a certificar C2 pero a los que terminen el bachillerato bilingüe sí, estaremos hablando de un grave despropósito. Os cuento mi situación:
Soy un estudiante de 4º ESO. Si el bachillerato bilingüe se implanta en el curso 2009-2010 significará que a mi y a todos los de mi edad nos va a pillar en 2º de bachillerato, y no sé si te convalidarán C2 o no, pero en cualquier caso sería una grave injusticia, porque EL NIVEL DEL INSTITUTO NO ALCANZARÁ NI DE LEJOS AL DE 5º DE LA E.O.I., Y EN EL INSTITUTO VAN A CERTIFICAR C2 Y EN LA E.O.I. SOLO B2.
Pido por favor, quien tenga que tomar la decisión final, que se ponga en mi lugar. Llevo aproximadamente 700 horas estudiando inglés por mi cuenta. Es su decisión si eso ha sido tiempo perdido o tiempo aprovechado

Anónimo dijo...

El hecho de que el nivel avanzado tenga como referencia el nivel B2 del Consejo de Europa deriva del Real Decreto 1629/2006, de 29 de diciembre, que firmó la Ministra Mercedes Cabrera. Las Comunidades Autónomas no pueden sino respetarlo. Así que al maestro armero, y a leer un poquito.

Anónimo dijo...

Llevo muchos años de profesor de EOI. Mis compañeros y yo preparábamos y examinábamos en el nivel C2, que no otra cosa era el nivel del Ciclo Superior, y no hay más que comparar los descriptores en la legislación que aplicábamos en su momento con los descriptores del Marco Común Europeo y las equivalencias de ALTE, entidad ASESORA Y RECONOCIDA por el Consejo de Europa. Además, están los libros de texto, las fuentes de nuestros exámenes y el éxito de nuestros alumnos en exámenes independientes para probarlo.
Si algún mal profesional hizo lo que no debía, regalando aprobados en plan buen rollito, que lo diga y dé su nombre, con un par, pero que no juegue con el buen hacer de la mayoría, a los que nos tocó currar duro, preparar a fondo y exigir un nivel.

En cuanto al Marco Europeo, consultad sólo la versión original, que es la inglesa; la versión española del Cervantes es una vergüenza con graves errores de traducción, como la salvajada de traducir "Level B2-Vantage" por "Nivel Avanzado" (Capítulo 3.6). Ni "Vantage" quiere decir "Avanzado" (¡es que no tiene absolutamente nada que ver!), ni esos nombres -Waystage, Threshold, etc- son más que un bautizo ocurrente. Y así estamos ahora, con un nivel intermedio, que eso es el B2, que se quiere colar como avanzado.

Y sobre lo malo que es el PP y Esperanza, los cambios en las EOIs vienen por legislación nacional de obligado cumplimiento que ha elaborado y aprobado el PSOE, osea, d. JL Rodríguez Zapatero y sus ministros (Sra. Cabrera en este caso). A ver si ahora demostramos independencia intelectual y les criticamos igual que si hubiera sido cosa del PP.

Saludos,

RL

José Manuel dijo...

La Consejería se está gastando una pasta gansa en formar a los profesores de las secciones bilingües en el British, con estancias en el extranjero incluídas. Los inspectores que solicitan cursos de formación, también van al British.

El Ministerio de Defensa no le encarga a las EE.OO.II. la organización y evaluación de las pruebas de idiomas.

¿Es ésta manera de demostrar confianza en la calidad de nuestras enseñanzas? Cuánto dinero nos estamos gastando en beneficiar a los grandes lobbies de presión en la enseñanza de idiomas.

Tenemos que pegar ese puñetazo en la mesa que nos redima de tanta relegación. Y tenemos que ir todos juntos: profesores y alumnos.

Anónimo dijo...

A mí me parece que la limitación de los niveles hasta B2 no es sino un ejercicio de honestidad. Yo soy profe de español en Rusia y me veo obligada a trabajar con otros profes no nativos (rusos) que, de verdad, por muy bien que hablen no están capacitados para enseñar un C1 ni un C2, porque esa es labor que sólo puede ejercer un nativo.

Claro que, como dicen por arriba, debería hacerse una excepción con los idiomas del Estado, que sí son enseñados por nativos.